Odisea de paramédicos con los pacientes Covid en el IMSS
-Paramédicos de ambulancias esperan largas horas en los hospitales “T1” y “Juárez” del IMSS y luego los rechazan
-Pacientes que se agravan y paramédicos que se desmayan porque no los atienden en los hospitales federales
Mérida, Yucatán, 6 de julio de 2020.- Una paramédica de los servicios de ambulancias que trasladan pacientes a los hospitales federares que hay en Yucatán reveló la odisea que tienen que pasar y el rechazo a aceptar a los enfermos que llevan, a pesar de tener camas disponibles y el equipo necesario.
Alondra Canché Obrero, paramédica de ambulancias narró que esta situación se ha presentado en el Hospital General Regional “Ignacio García Téllez”, mejor conocido como T1, del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) del Gobierno federal y también se ha repetido también en el “Benito Juárez” también perteneciente a la misma institución.
La paramédica que
trabaja en la Cruz Roja Mexicana, dijo que esta acción no sólo ha entorpecido
la labor de este cuerpo médico, sino que principalmente ha perjudicado la salud
de los pacientes al no recibirlos y poner en riesgo su vida, “pues por la
condición en la que llegan es urgente ingresarlos y veces se pierden minutos
valiosos al llevarlos a otro hospital, por lo que algunos han fallecido en el
traslado”.
“Los hospitales
federales no los reciben o tardan más de 4 horas en atenderlos o los envían a
otros nosocomios. Nos ha pasado que llegamos al hospital y nos dice que está
lleno, que ya no hay espacio, no hay camas y te dejan esperando con el paciente
en la ambulancia hasta 2, 3 ó más de 4 horas y al final no te dan acceso ni al
estacionamiento, nos dejan esperando bajo el sol por lo que eso provoca una
deshidratación severa”, relató la paramédico.
Agregó que la larga
espera de más de 4 horas ha perjudicado la salud de los pacientes o de los
propios paramédicos.
“Ha ocurrido que el paciente se desespere mucho en las cápsulas de protección por las horas de espera y eso empeora sus signos vitales, imagínate si el paciente ya está grave desde su domicilio y que por esa razón lo trasladas para una atención hospitalaria en una cápsula aislante, pues comienza a desesperarse tanto que sus signos vitales empiezan a alterarse”, dijo.
“En el caso de nosotros, nos llegamos a deshidratar y hay compañeros que se desmayan en la ambulancia, entonces ya pasamos de uno a dos pacientes”, agregó.
Canché Obrero
indicó que negar el acceso de los pacientes a los hospitales federales es una
práctica común del personal, sobretodo de “la T1 y el hospital Juárez, “te
dejan esperando 4 o 5 horas y luego te dicen: ’no tengo espacio’”.
De acuerdo al
protocolo que siguen, los paramédicos reportan esta situación a la central y
esta le asigna otro hospital que, en varias ocasiones han tenido que ser
reubicados a hospitales estatales.
“No te dan
explicaciones del porqué no te aceptan a los pacientes, solamente te dicen que
no hay espacio, cuando sabemos que existe camas suficientes. Es lamentable porque
si realizamos el traslado es porque consideramos que necesitan atención de un
médico y de un hospital y cuando llegas te dicen ¿Para qué me los trajiste? Que
los regresen a su casa” o te dicen que no ameritan una hospitalización”,
lamentó la profesional.
Esta situación peligrosa para los pacientes se debe a una mala organización, pues el mismo IMSS ha dicho que hay camas y equipos suficientes para atender a los enfermos de Covid-19, pero los hospitales federales se han negado a recibirlos.